La historia de esta firma es preciosa. Llena de sueños y objetivos marcados que con el tiempo se han ido cumpliendo gracias a sus valores y sobre todo a su dedicación e intenso trabajo.
Todo empezó con un sueño: “VDT Abogados nació de la mano de su codirectora y fundadora María Victoria Vega, que después de dedicarse profesionalmente durante dieciséis años a la empresa privada, decidió que era el momento de ejercer la abogacía y ponerse la toga en pro de defender los derechos desde la primera línea, en sala.”
El segundo sueño fue crecer. Dejar a un lado el personalismo y crear una organización. “VDT se corresponde a los apellidos de la fundadora “Vega” y su hijo Borja Díaz-Toledo Vega, “Diaz-Toledo” que se encontraba haciendo la carrera de derecho cuando el despacho nació.
¿Cómo nació vuestra firma?
Después de dedicarme dieciséis años a trabajar en la empresa privada, decidí salir de la zona de confort (no te negaré que había muchas cosas en la empresa que trabajaba que ya no me convencían y probablemente había llegado al punto de no retorno) y unido a mi vocación de letrada (necesidad de ejercer en Sala, ir a juicios) decidí que era la hora de dar el paso, y me lancé al vacío.
Digo al vacío porque no tenía nada, estaba sola, no tenía un despacho (puse una mesa en el salón de mi casa, un ordenador y empecé allí), no tenía clientes (poco a poco con recomendaciones de amigos, conocidos que tenían problemas legales, el boca a boca iba consiguiendo algún que otro caso..), no tenía infraestructura (hacia las tarjetas en la impresora y las cortaba con una tijera, un amigo tenía una impresora de etiquetas (mi hija Paula, la mediana, que tenía 18 años entonces y es muy creativa me hizo el logo de VDT, solo le di dos pautas: en color azul como el mar y que la «D» fuera la vela de un barco puesta al revés, contra el viento) me sacaba el logotipo impreso y lo pegaba en carpetas normales compradas en la papelería.
Unos comienzos poco profesionales, utilizando los medios que tenía, pero que diez años después me hacen sonreír y ver que ahí sigue mi barco navegando con la vela contra el viento.
¿Cuáles son vuestros elementos diferenciales? ¿Cuáles son vuestros valores?
Nos diferenciamos por darle al cliente un papel fundamental, su verdad es nuestra verdad.
El valor de la firma es precisamente ese, no es un cliente más y no queremos que sufra su problema judicial sin sentir que estamos a su lado, que nuestro trabajo va a servir para que pueda solucionarlo y además no se va a sentir solo en ese camino judicial.
Valoramos mucho el rigor profesional que tenemos en cada caso, pero valoramos aún más el compromiso personal que adquirimos con cada uno de ellos. Somos legales y leales con nuestros principios.
¿Qué servicios ofrecéis?
Ofrecemos todos los servicios legales a empresas (servicios jurídicos en general, hemos llevado entes públicos y empresas privadas y dentro de esos servicios todo: laboral, mercantil, contencioso-administrativo, etc) y también toda la parte de cumplimiento normativo para personas jurídicas (compliance, PBC y FT, protección de datos) y con respecto a los clientes (personas físicas y no jurídicas) somos especialistas en derecho penal económico, derecho UE (hemos llevado varias demandas a Estrasburgo), civil, mercantil, laboral y desde hace tres años llevamos Real State.
¿A qué tipo de cliente van dirigidos?
Cualquier cliente que entre en VDT es bienvenido, haremos que se sienta en un entorno seguro, de confianza y rodeado de un buen profesional que sepa como solucionar su problema.
En el momento actual y por ese proyecto de futuro de crear más despacho, estamos dirigiendo nuestros servicios a las empresas.
¿Cuáles son vuestros proyectos de futuro?
Crecer como despacho, ampliar nuestra cartera de clientes y ampliar el equipo de profesionales. Es un proyecto muy ambicioso pero lo vamos a hacer como en nuestros inicios, sin prisa, dando los pasos correctos y encaminados a ir creando una firma de abogados sólida que pueda perdurar en el tiempo.
En un momento de crisis como el actual, ¿Qué consejos dais a vuestros clientes?
Que después de la tormenta, siempre llega la calma. Ya hemos vivido momentos de crisis que nos han obligado a reinventarnos en estos diez años, hemos aprendido a navegar con el viento en contra y mantenernos a flote, y esa experiencia es la que queremos transmitir al cliente.
Este año celebráis vuestro décima aniversario y estás preparando una fiesta con mucha ilusión.
Gloria, voy a hacer la celebración del X aniversario de VDT antes de que acabe el año.
Una amiga artista, mujer líder, escultora, Ana Hernando ha hecho una escultura pequeñita que se llama “en un abrazo” (una figura está elevando a la otra) porque ha sido así, Gloria. He llegado aquí porque no iba sola. Estos 10 años muchas personas han estado en mi camino. Ana va a hacer tarjetón con la foto de “en un abrazo” y por detrás voy a pensar en alguna frase conmemorativa.
Quiero agradecer todo lo que me han dado estos 10 años. Tú, gracias a la vida o a LinkedIn has llegado en el año 10 y ya te quedas para siempre.