La volatilidad, entendida como las fluctuaciones bruscas y considerables en los precios de los activos financieros, puede representar un riesgo para quienes buscan estabilidad y crecimiento en sus ahorros destinados a la jubilación. Es evidente que, para las personas mayores de 55 años, este fenómeno resulta aún más preocupante, ya que su horizonte temporal se reduce y disponen de menos tiempo para recuperarse de eventuales caídas.
Sin embargo, lamentablemente, este no es el único desafío que enfrentan los jubilados. También deben estar atentos al riesgo de perder el control, a la posibilidad de realizar una asignación inadecuada de sus inversiones, a dejarse influir por las emociones y, especialmente, a sufrir pérdidas en los primeros años de jubilación.
Pero no todo está perdido. Los inversores de mayor edad pueden hacer frente a los altibajos del mercado si adoptan una serie de precauciones que les permitan mitigar los riesgos asociados a la volatilidad. A continuación, se presenta una guía para proteger los ahorros destinados a la jubilación:
1º Diversifica tu cartera de inversión
La diversificación es fundamental para disminuir el impacto de la volatilidad. Al repartir tus inversiones entre distintos tipos de activos —como acciones, bonos, fondos indexados y activos alternativos (inmuebles, materias primas, infraestructuras, etc.)—, reduces el riesgo de sufrir pérdidas significativas si un sector en particular experimenta una baja. Así, en caso de que las acciones disminuyan, otros activos como los bonos pueden contrarrestar el efecto negativo, ayudando a mantener la estabilidad de tu cartera.
2º Ajusta el nivel de riesgo según tu edad
Aunque es posible gozar de una excelente calidad de vida tanto a los 60 como a los 75 años, la planificación para la jubilación requiere considerar diferencias importantes. En general, los inversores más jóvenes pueden asumir mayores riesgos debido a que tienen más tiempo para recuperarse de eventuales caídas en el mercado. No obstante, a medida que se acerca la jubilación, es recomendable reducir la exposición a activos volátiles, como las acciones, y enfocarse en inversiones más seguras, como bonos de alta calidad o fondos de renta fija. Una regla clave es ir adaptando el nivel de riesgo conforme envejeces.
3º Crea un fondo de emergencia
Uno de los pasos esenciales para salvaguardar tus ahorros es evitar depender de ellos para cubrir gastos imprevistos. Contar con un fondo de emergencia bien dotado te permitirá afrontar situaciones inesperadas, como reparaciones en el hogar o emergencias médicas, sin tener que retirar dinero de tu cuenta de jubilación en momentos desfavorables del mercado. Para ello, es importante evaluar de forma exhaustiva todas tus fuentes de ingresos para la jubilación y planificar de acuerdo a ellas.
4º Mantén una perspectiva a largo plazo
La volatilidad puede inducir al pánico y llevar a algunos inversores a tomar decisiones impulsivas, como vender sus activos en medio de una caída del mercado. Sin embargo, es crucial recordar que la inversión para la jubilación tiene un horizonte de largo plazo. Las caídas temporales rara vez deben generar alarma si se cuenta con una perspectiva de varias décadas. Mantén la calma y evita cambios drásticos, ya que, en muchas ocasiones, el mercado tiende a recuperarse con el tiempo.
5º Revisa y ajusta tu plan periódicamente
Los mercados evolucionan, al igual que tus circunstancias personales. Por ello, resulta importante revisar con regularidad tu plan de jubilación para asegurarte de que sigue alineado con tus objetivos y tu tolerancia al riesgo. Además, estar atento a los movimientos del mercado te permitirá, en determinadas ocasiones, vender activos que hayan tenido un buen desempeño para redirigir esa inversión hacia aquellos que han tenido un rendimiento menor en el corto plazo, materializando así el objetivo de “comprar barato y vender caro.”
6º Busca asesoramiento
Contar con el apoyo de un asesor financiero puede ser clave para realizar los ajustes necesarios y mantener tu estrategia en buen camino, incluso en épocas de alta volatilidad. Este profesional puede convertirse en tu mayor aliado para alcanzar la tan deseada jubilación de manera exitosa. Por ejemplo, MAPFRE dispone de un área especializada en asesoramiento financiero, MAPFRE Gestión Patrimonial, que tiene como misión democratizar el acceso a los servicios de banca privada y ayudar a sus clientes a cumplir sus metas financieras.