El aumento de la inflación desde la pandemia, junto con la posterior subida de tipos de interés, la ralentización de ciertas economías y tendencias a largo plazo, como el incremento de la esperanza de vida, han complicado el panorama para las gestoras de planes de pensiones. “Esta es una realidad en muchas regiones del mundo, incluyendo América Latina. La disminución de la tasa de natalidad combinada con el aumento de la esperanza de vida representa un desafío adicional para los fondos de pensiones”, indicó Ricardo Ventrilho, responsable de relaciones con inversores de MAPFRE Investimentos, durante su intervención en el encuentro ‘A Estructura da Previdéncia na Europa’, patrocinado por MAPFRE AM y organizado por Abrapp, la asociación que representa a las entidades de previsión complementaria en Brasil.
Gonzalo de Cadenas Santiago, subdirector general de MAPFRE Economics, añadió durante su intervención en el evento que el factor demográfico tiene un gran impacto tanto en el crecimiento como en el ahorro: la esperanza de vida ha aumentado, y con ella, se ha producido una disminución de la tasa de natalidad. “América Latina ya ha capitalizado lo que los economistas llaman el dividendo demográfico”, subrayó.
Esa transición demográfica que está experimentando el continente en los últimos años se está llevando a cabo sin haber generado el suficiente ahorro: actualmente, existe una brecha de diez puntos porcentuales entre el ahorro bruto de la región, que se sitúa en el 21%, y el que se necesita, que ronda el 30%.
“El ahorro en América Latina es insuficiente desde cualquier métrica: es el segundo más bajo medido por regiones económicas y ocupa un lugar que no le corresponde por nivel de renta, especialmente si consideramos el estado de su transición demográfica”, señaló el subdirector general de MAPFRE Economics, destacando la necesidad de que ese ahorro sea finalista y esté intermediado por el sector financiero.
Para De Cadenas Santiago, las formas más eficaces de promover el ahorro incluyen la adaptación de la política fiscal y los tipos de los distintos impuestos para fomentar el ahorro, junto con la reducción de la informalidad laboral y de ahorro, y el impulso de la cultura financiera.
La sostenibilidad, clave en la estrategia de MAPFRE
La sostenibilidad es una de las principales tendencias en el mundo de la inversión y está entre las prioridades de MAPFRE en su estrategia desde 2017. En ese año, el Grupo adquirió un paquete accionarial del 25% del capital de la firma de gestión de activos francesa La Financière Responsable (LFR), y en febrero del año pasado, compró otro paquete accionarial que le permitió aumentar ese porcentaje hasta el 51%, convirtiéndose en el accionista mayoritario.
“Nuestra metodología es válida para evitar el ‘greenwashing’. Lo más importante para nosotros era no tener un problema reputacional y que todo lo que hiciéramos en este sentido fuera ‘in house’”, destacó Eduardo Ripollés, director de desarrollo de negocio institucional de MAPFRE AM, durante su intervención en el evento.
Desde entonces, MAPFRE AM ha lanzado tres fondos de inversión con características sostenibles junto a LFR: MAPFRE AM Capital Responsable, MAPFRE AM Inclusion Responsable y MAPFRE AM Good Governance.
Ripollés enfatizó además que un enfoque sostenible no está reñido con una rentabilidad atractiva para los inversores y estos tres vehículos son el mejor ejemplo. MAPFRE AM Inclusion Responsable acumula una rentabilidad a un año del 14,6%; MAPFRE AM Good Governance, del 12,59%, y el MAPFRE AM Capital Responsable, del 4,28%.